El movimiento en ellas se da fundamentalmente de manera horizontal y en paralelo a la dirección de la superficie de la falla y también se denominan desgarres, los cuales suelen tener una traza visible por largas distancias y poseen una zona de fracturas que pueden ser de varios kilómetros de ancho y que al formarse pueden cortar otras estructuras y triturar y romper rocas, lo que acaba produciendo valles o depresiones. Además, se puede clasificar en dextral, si el bloque se movió hacia la derecha, o sinestral, si fue hacia la izquierda. Pueden acomodar el movimiento entre 2 placas tectónicas, lo que la convertiría en una falla transformante