Radioterapia: es un procedimiento que permite conservar el tejido sano, está indicado en casos que requieren grandes cirugías reconstructivas que pueden ser desfigurantes, especialmente región nasal, pabellón auricular y periocular. Es útil en pacientes ancianos que rechazan cualquier procedimiento quirúrgico o están en malas condiciones de salud. En lesiones de 1cm o menos, alcanza altos índices de curación, especialmente si es utilizada en forma fraccionada. En tumores de mayor tamaño, ubicación en zonas de alto riesgo, o patrones histológicos agresivos, la respuesta es menor
Criocirugía: es un procedimiento operador dependiente, por lo que se necesita experiencia y un adecuado equipo. Se requieren 2 ciclos de congelación-descongelamiento para llegar a una temperatura de -50ºC a excepción de los superficiales que requieren solo un ciclo y en todos los casos debe considerarse un margen de piel “aparentemente sana” para compensar el crecimiento subclínico. En casos complejos puede ser necesario una biopsia preoperatoria para determinar el tipo histológico y extensión, así como post-tratamiento para evaluar el éxito terapéutico. Utilizada en tumores de menos de 1cms se ha alcanzado promedios de curación de hasta un 97%, siendo la recidiva altísima en tumores de mayor tamaño. Es una buena opción terapéutica en pacientes en mal estado de salud, que toman anticoagulantes o usan marcapasos