este modelo en yeso de una obra de bronce, fue encargado a principios de la década de 1840 por Claude Noisot, ex granadero y capitán de la Vieille Garde. El ejército era un devoto fiel del emperador, y que había participado en las campañas de Alemania y España en 1809, Rusia en 1812, Alemania en 1813 y Francia en 1814. Había querido acompañar a Napoleón en exilio en Elba y, naturalmente, había apoyado su regreso a los Cien Días.