Las locuciones adverbiales están formadas por dos o más palabras con un sentido específico, que —aunque pertenecen a otras clases de palabras— funcionan como adverbios; por ejemplo: a caballo, a cántaros, por casualidad, de golpe, en absoluto, al final, como mucho, a lo sumo, a oscuras, de mala gana, de vez en cuando, de repente, en definitiva, en fin, en un santiamén, desde luego, por de pronto, por poco, sin cuidado, sin ton ni son, tal vez.