Josefa Dominga quedó sola, no habían tenido hijos, y decidió dedicar lo que le quedara de vida a ayudar a quienes lo necesitaran. Para esto, adaptó la casona en la que vivía y la convirtió en un asilo de ancianos. ... Así, la casa de Josefa, durante la guerra, fue conocida como Hospital Militar Auxiliar Nº 89.9