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ENFERMEDADES INFECCIOSAS PROFUNDAS - Coggle Diagram
ENFERMEDADES INFECCIOSAS PROFUNDAS
OSTEOMIELITIS
Osteomielitis hematógena aguda (etapa I de CM).
Es una infección ósea de duración superior a dos semanas, sin evidencia de enfermedad aguda. Puede ser causada por una resistencia del huésped aumentada, bacterias de escasa virulencia o antibióticos suministrados en forma precoz. El cuadro clínico está dominado por el dolor.
Suele ser un paciente con fiebre, signos localizados como edema, dolor y limitación de movimiento o pseudoparálisis de la extremidad afectada.
Los microorganismos causales suelen ser: S. aureus, aveces estreptococoos o bacilos gram negativos: Haemophylus influenzae.
Recién nacidos: Cefotaxima intravenosa: < 7 días: 50 mg/kg/12 horas; 7-21 días: 50 mg/kg/8 horas.
Menores de 5 años: Cefuroxime intravenosa 50 mg/kg/8 horas.
Mayores de 5 años: Cloxacilina intravenosa 50 mg/kg/6 horas o clindamicina 10 mg/ kg/6 horas hasta un máximo de 675 mg por dosis /6 horas.
Las infecciones pueden llegar a un hueso al viajar a través del torrente sanguíneo o al extenderse desde el tejido cercano. Las infecciones también pueden comenzar en el propio hueso si una lesión expone el hueso a gérmenes.
Osteomielitis aguda de foco contiguo.
Infección asociada con insuficiencia vascular: se presenta principalmente en pacientes con diabetes mellitus y/o enfermedad vascular periférica. Ocurre con mayor frecuencia en los huesos de los pies: falanges, las cabezas metatarsianas y el calcáneo.
Las manifestaciones clínicas incluyen fiebre, tumefacción, dolor y limitación de movimientos.
Microorganismos causales: S. aureus, bacilos gram negativos intestinales, Pseudomonas aeruginosa, Pasteurella multocida y anaerobios.
El tratamiento se basa en antibióticos y, en algunos casos, cirugía.
Osteomielitis neuropática isquémica aguda.
Se caracteriza por ocurrir en pacientes con afección arterial o nerviosa o en las infecciones de pie diabético.
Los microorganismos causales son: los estafilococos, estreptococos y los anaerobios.
Las manifestaciones clínicas son de predominio local; dolor, edema, eritema, celulitis, ulceración y pus.
El tratamiento es quirúrgico, drenando la pus y extraer el tejido necrótico.
Osteomielitis crónica (piógena).
Es una enfermedad de tipo infecciosa con manifestaciones locales y generales, el diagnóstico que se realiza es clínico debido a la poca especificidad de los exámenes complementarios, en especial en los primeros estadios de la enfermedad.
Es causada por bacterias piógenas típicas, sobre todo estafilococos.
Las manifestaciones clínicas son: dolor lev con edema, que puede ser escarlata, con fistulas, cicatrización y rigidez si la infección se disemina a la articulación adyacente.
El tratamiento suele ser con flucloxacilina, a menudo mas rifampicina, por lo menos por seis meses.
INFECCIONES OSEAS ESPECIALES, TROPICALES O RARAS
OSTEOMIELITIS SUBAGUDA
Osteomielitis relacionada con dispositivos.
La infección puede presentarse semanas después de la inserción de un dispositivo ortopédico.
Los microorganismos causales: S. aureus o estafilococos, estreptococos, bacilos gram negativos.
Los síntomas consisten principalmente en dehiscencia de la herida y secreción purulenta.
El tratamiento dependerá del agente causal, en infecciones raras requerirá tratamiento quirúrgico.
Osteomielitis de los cuerpos vertebrales.
La osteomielitis vertebral puede ser aguda, si evoluciona en días o semanas, o crónica, que se define de forma arbitraria como una infección que evoluciona a lo largo de meses e incluso años, y que se caracteriza por la persistencia de microorganismos, inflamación de bajo grado y la presencia de necrosis ósea y trayectos fistulosos en el hueso
Microorganismos causales por lo general: S. aureus, raramente con bacilos gramnegativos, entre los que incluyen Salmonella, o Pseudomonas spp. Candida spp.
Las manifestaciones clínicas son dorsalgia persistente, espasmo muscular, dolor referido, y mas tarde compresión de medula espinal con paraparesia o paraplejia.
El tratamiento depende del microorganismo patógeno, y de las pruebas de sensibilidad.
Osteomielitis micótica.
Se caracteriza por cronicidad, lesiones osteoliticas y tarde o temprano un absceso.
Microorganismo causales son Candida spp. pero hay osteomielitis en las micosis generales, la aspergilosis, la esporotricosis y la cigomicosis.
Tratamiento típicamente consiste en anfotericina B, pero los nuevos y potentes antimicoticos azolicos son menos tóxicos y a menudo eficaces.
OSTEOMIELITIS CRONICA
Actinomicosis.
Infección ósea crónica muy rara debido a actinomicosis dental; sinusal o pulmonar; el microorganismo causal suele ser A. isteaelii.
Manifestaciones clínicas son formación de fistulas, gránulos de azufre en la pus, cicatrización.
El tratamiento es con penicilina prolongada a dosis altas, al principio por vía intra venosa durante 4 a 6 semanas, luego por vía oral hasta durante 12 meses.
Brucelosis.
Infección del espacio interdiscal; el microorganismo causal suele ser B. melitensis.
Las manifestaciones clínicas son dorsalgia, fiebre, malestar y letargia.
El tratamiento suele ser con rifampicina mas doxiciclina, durante 6 semanas; puede utilizarse gentamicina durante dos semanas.
Tuberculosis.
Es la localización del bacilo de KOCH a nivel del hueso y/o de las articulaciones. Generalmente afecta las articulaciones (osteoartritis) y es menos frecuente en los huesos (osteomielitis).
Los síntomas suelen manifestarse de forma local. Por ejemplo: dolor óseo o articular, inflamación, aumento de volumen (edema), claudicación y limitación en los movimientos.
La enfermedad de tuberculosis se diagnostica con los antecedentes médicos, un examen físico, una radiografía de tórax y otras pruebas de laboratorio. La enfermedad de tuberculosis se trata tomando varios medicamentos según las recomendaciones del proveedor de atención médica.
INFECCIONES ARTICULARES
Artritis infecciosa.
Es una infección en la articulación. La infección proviene de una infección bacteriana, viral o por hongos que se disemina desde otra parte del cuerpo. Los síntomas de la artritis infecciosa incluyen: Dolor intenso en la articulación.
La infección bacteriana por Staphylococcus aureus (estafilococo) es la causa más común. El estafilococo vive normalmente incluso en la piel sana.
Los síntomas son dolor intenso en la articulación, enrojecimiento e hinchazón de la articulación, escalofríos y fiebre, imposibilidad de mover el área de la articulación infectada
El tratamiento se realiza con antibióticos por vía IV y drenaje de pus de las articulaciones.
Infecciones de los discos intervertebrales.
Se denomina discitis infecciosa. Si es mixta (disco y vértebra) se hablará de espondilodiscitis infecciosa. Si la infección llega a afectar las membranas que recubren el sistema nervioso se desarrollará una meningitis.
Los síntomas son dolor local, inespecífico y moderado, fiebre, malestar general y cansancio generalizado, alteraciones neurológicas.
Las pruebas de laboratorio (velocidad de sedimentación globular (VSG), proteína-C reactiva (PCR), procalcitonina, fórmula leucocitaria etc. Son parámetros indispensables para el control de este tipo de enfermedad.
El tratamiento de cualquiera de estas infecciones es la antibioterapia intravenosa. Si conocemos el patógeno que ha provocado la infección se le administrará antibioterapia dirigida. Si aún se ignora el origen de la infección se implementará antibioterapia de amplio espectro.