Zona de subducción Ecuatoriana
La fosa colombo-ecuatoriana, provocada por la subducción de la placa de Nazca, por debajo de la placa sudamericana provoca que nuestro país sea muy activo en el contexto sísmico.
Antes del 2016, esta región habia sufrido al menos 5 terremotos asociados a la subducción: 1906 (8.8 Mw), 1942 (7.8 Mw), 1958 (7.7 Mw), 1979 (8.2 Mw) y 1998 (7.1 Mw)
Todos estos eventos tienen la característica de haber desarrollados en la zona de subducción pero también están asociados a un tipo de mecanismo de ruptura segmentado
Este mecanismo es el denominado acoplamiento interplaca
A su vez, en la sección del Slab donde se genera este mecanismo existen los denomindos "Parches sismicos" que son secciones del Slab subductante donde las asperezas existentes condicionan la geometria y propagación de la ruptura
Se han realizado modelos númericos donde se ha concluido que estas secciones son donde se desarrollan la mayor parte de los terremotos asociados a la subducción
La cantidad y sobre todo, la extensión y potencia de estas asperezas pueden proveer particularidades frente a la manifestación de la energía sísmica y la generación de terremotos de distintas magnitudes
Los eventos de desgarre o deslizamiento lento, llamados asi, por la bajísima velocidad de ruptura comparados con los terremotos comunes, pueden durar días e incluso años provocando actividad sísmica que se ha estimado puede llegar hasta los 4,4 Mw de magnitud
Esto fue lo que ocurrió en la isla de la Plata en el 2010, donde se detecto un enjambre de al menos 650 microsismos
Este mismo evento se produjo en la misma región en 1998, 2002 y 2005 con duraciones de 1 a 3 meses.
Para la evaluación de este mecanismo, se analiza en detalle el grado de bloqueo de la zona interplaca a través de la utilización de estaciones GPS de alta precisión
Gracias a esto, se ha logrado determinar que la subducción en la fosa ecuatoriana es heterogénea y el acoplamiento de las placas decrece hacia el sur
Se han identificado 3 grandes asperezas en la fosa ecuatorina, algunas de ellas relacionadas con Carneguie :
En el sur, desde la península de Sta.Elena hasta la isla de la Plata; se subdivide en dos segmentos de los cuales la más grande se encuentra debajo de la Isla de plata
En la región central, desde Bahía de Caráquez hasta el promontorio de Atacames; se divide en tres secciones dos al sur que pueden estar asociadas con los terremotos de 1998 y 1942, y otra al norte que aun está intacta
En el Norte, desde Esmeraldas hasta Manglares; Se divide en dos asperezas grandes y altamente acopladas que de forma individual pueden estar asociadas a los terremotos de 1958 y 1979
Estas asperezas se pueden presentar segmentadas como sucede en el modelo de subducción ecuatoriano
Se piensa que los terremotos más grandes se generan cuando hay una ruptura simultanea de grandes secciones de asperezas
A través de análisis temporales se ha determinado que los eventos de desgarre lento son mecanismos que contribuyen significativamente a la liberación asismica del estres intraplaca, además de esta forma se puede evaluar la recurrencia de un sismo y su probable magnitud.
Se ha demostrado que la subducción de prominencias topográficas, como seamonts, cordilleras submarinas o zonas de fractura pueden reducir significativamente el acoplamiento de las placas
Al subducirse estas estructuras generan una zona asismica de debilidad en la interfase de las placas y actúa como una especia de barrera para la propagación de una ruptura
En el ecuador la cordillera submarina de Carneguie y la zona de fractura de Jama son los mejores ejemplos
Sin embargo, durante una ruptura estas pueden fallar y provocar una amplifiación de la mismas, por tanto se habla de un comportamiento Bi-modal de estas
La magnitud de los terremotos generadas por estas asperezas estan relacionadas a si las rupturas de estas fueron individuales o simultaneas donde los mogmentos sismicos individuales son sumados, como lo ocurrido en el sismo de 1906, donde se cree que hubo la ruptura de dos asperezas muy grandes o de cinco pequeñas
Reflexión sobre el terremoto de Pedernales en 2016
Sin lugar a duda, queda claro que la dinámica de la tectónica a la que está sometida nuestra región y más concretamente nuestro país es muy compleja y enigmática, quedan demasiados aspectos por entender y por dilucidar, sin embargo, los avances en la investigación de las ciencias de la tierra han sido notorios y en este caso quienes escribieron este artículo de cierta manera tuvieron la razón. Es muy llamativo leer que como resultado de la investigación y toda la información procesada, ellos mencionan que un terremoto de al menos 7,5 Mw estaría próximo a ocurrir en la siguiente década. Si tomamos en cuenta que el artículo es publicado en 2014, pues está interpretación no era para nada errónea. El 16 de abril de 2016 ocurrió el evento del que se hablaba. Esto quiere decir que los esfuerzos de los científicos por entender a los terremotos van mejorando, pero aun queda que la sociedad y los entes del estado valoren a la comunidad científica y que más aun se invierta en estos aspectos que de seguro salvarían muchas vidas. Este es un claro ejemplo de lo que la ciencia puede aportar no solo al conocimiento, sino también a una gestión adecuada del riesgo en una comunidad. Habría que plantearse la pregunta ¿ Qué hubiese pasado si toda esta información habría sido tomada en cuenta para generar acciones de prevención y mitigación ? A lo mejor el desenlace del terremoto del 2016 hubiese sido al menos un poco distinto, a lo mejor muchas vidas se hubiesen salvado, a lo mejor muchas infraestructuras habrían resistido. Nadie puede saberlo, pero lo que es seguro es que debemos ser mas consientes del entorno en el que vivimos y apostar por una actitud resiliente para no hacernos daño a nosotros mismos.