En la época virreinal el rol de la mujer era principalmente la de servir a su esposo, velar por la educación de los hijos y el bienestar en el hogar.
Los roles que han cambiado básicamente son los que derivaban de las opciones que tenían las mujeres en esta época: el recogimiento en conventos y el matrimonio.
Por su parte, el rol de los hombres era dirigir la institución familiar, los asuntos económicos, ejercer los derechos políticos, prepararse intelectualmente y para la guerra.
Además de ello, en el caso de los hombres de clase baja debían asumir las labores de trabajo pesado como la agricultura, minería, pesca, construcción, entre otros, y procurar el sustento para su familia.