Ierushalaim estaba bajo el dominio musulman, como los critsianos les pagaban impuestos, esto era una fuente de ingresos, por lo que los trataban bien, en cambio, cuando Ierushalaim cayó en manos de los turcos, estos no podían tolerarlos y los maltrataban. Ahí la Iglesia y el bajo y alto clero decidieron reunificar a sus seguidores para tratar de conseguirla, iniciando las cruzadas. Tambin ellos querían desviar los ataques que amenazaban la seguridad de la Iglesia, les preocupaba mucho los enfrentamientos entre la iglesia y los señores feudales, pretendían guiar a las masas a la liberación del santo sepulcro. La nobleza pudo conquistar nuevos territorios, pero su sistema agrícola feudal se estaba agotando. Los comerciantes deseaban la ampliación de sus mercados y por último, los campesinos querían liberarse del trabajo y opresión, para ellos esta era una oportunidad de nuevas hazañas y aventuras.