Padece frecuentemente trastornos psiquiátricos del Eje I (p. ej., estado de ánimo, ansiedad, consumo de sustancias) y del Eje II (p. ej., personalidad límite, obsesivo-compulsivo); el abuso o la dependencia simultánea del alcohol también es muy común, con una tasa del 46%; informan tener menor apoyo emocional por sus allegados, además los comportamientos bulímicos afectan al cuerpo en términos de complicaciones orales, síntomas gastrointestinales, anomalías renales y electrolíticas, síntomas cardiovasculares y consecuencias negativas para el sistema endocrino, reportando mayores dificultades con la autoconciencia de las emociones y tolerancia al malestar