Producida por fármacos, químicos, toxinas, venenos e infecciones que destruyen las membranas de los eritrocitos.
También por factores mecánicos como válvulas protésicas, vasculitis, quemaduras graves, CID, Purpura trombocitopénica, enfermedad renal.
Alteran los glóbulos rojos produciendo turbulencia y presiones cambiantes