...que te glorías en Dios y conoces Su voluntad; que apruebas las cosas que son esenciales, siendo instruido por la Ley, y te confías en que eres guía de los ciegos, luz de los que están en tinieblas, instructor de los necios, maestro de los faltos de madurez ;que tienes en la Ley la expresión misma del conocimiento y de la verdad, tú que enseñas a otro, ¿no te enseñas a ti mismo? Tú que predicas (proclamas) que no se debe robar, ¿robas? Tú que dices que no se debe cometer adulterio, ¿adulteras? Tú que abominas a los ídolos, ¿saqueas templos? (¿cometes sacrilegio?) Tú que te jactas de la Ley, ¿violando la Ley deshonras a Dios? Porque tal como está escrito: “el nombre de Dios es blasfemado entre los gentiles por causa de ustedes.”