se deberá proceder al análisis FODA de la organización con respecto a la capacitación y el sistema mismo de capacitación, donde se deberán determinar las fuerzas y debilidades del sistema y las oportunidades y amenzas del entorno en que se vaya a impartir la capacitación, los recursos con que se cuentan y los que se necesitarían y si no se tienen de momento, entonces resulta necesario determinar con anticipación, de donde se podrián obtener esos recursos para hacer posible que se imparta la capacitación necesaria o indispensable en la organización. Idnetificadas las fuerzas, debilidades de la organización y determinadas las oportunidades y amenazas del entorno, se estará en posibilidades de poder diseñar la estrategia a seguir en el plan integral de capacitación, es decir, en ésta etapa se debe establecer, de qué forma, con qué recursos, cuándo, dónde y quién impartirá la capacitación objeto de la planeación estratégica, quiénes estarán involucrados en este proceso, etc., esto es, en esta etapa, se deben tener claros todos y cada uno de los “pros” y “contras” que se pudieran presentar y también cómo se pretendería solucionarlos para alcanzar las metas establecidas y esperadas del sistema de capacitación, que por lo regular son: cambios de actitudes y desarrollo de habilidades o competencias, entre otros, desde luego, buscando que el trabajador sepa, pueda y quiera hacer su trabajo de la manera más eficiente y efectiva posible y que se traduzcan en una mejora de la productividad y competitividad organizacional.