Los pedidos realizados en persona, por teléfono, por correo o por fax son aún prácticas ampliamente extendidas. La clave para mejorar estos procesos de entrada de pedidos reside en minimizar el tiempo y el esfuerzo requerido por ambas partes, a la vez que se asegura la fiabilidad y la exactitud del sistema. La toma de pedidos mediante un sistema telefónico automatizado es una de las opciones. El contestador deberá estar respaldado por un sistema informático de generación de voz capaz de preguntar al cliente por los códigos del artículo y el número de unidades requeridas. El cliente podrá entonces contestar, bien de viva voz, bien mediante el teclado del teléfono. Por su parte, las páginas de Internet cada vez son más utilizadas para esta labor de toma de pedidos.