En el contexto del deporte y la competición, las relaciones interpersonales tienen una importancia crítica, tanto entre compañeros, como entre deportistas y sus entrenadores. La relación que forman estos juega un papel importante al proporcionar ayuda en momentos difíciles (por ejemplo, durante una lesión), en periodos de crisis emocional (por ejemplo, tras una descalificación de un torneo importante) o en momentos de transición, como la retirada deportiva