Datos bioquímicos, pruebas médicas y procedimientos de pacientes oncológicos adultos. Los ejemplos incluyen glucosa; recuento de glóbulos blancos; perfil de anemia nutricional (es decir, valores de hemoglobina, hematocrito, folato, vitamina B-12 y hierro); perfil electrolítico y renal; la función hepática; perfil inflamatorio, incluido el valor de la proteína C reactiva; y pruebas de función gastrointestinal (es decir, estudio de deglución, radiografías abdominales, vaciamiento gástrico y tiempo de tránsito). En los casos en que no se disponga de datos bioquímicos, los RDN deberían recomendar, como se indica.