Omnipenetrante y omniabarcadora es, al mismo tiempo, Una y Múltiple, única y Total, Fuente y Esencia, Causa y Condición, y todas las cosas no son más que gestos de esa Unidad y todas las formas meras combinaciones suyas. Como infinito exige admiración, como Dios, adoración, verdad, sabiduría y como verdadero yo del individuo exige identidad.