Mi relación con las artes es rara, creo que comenzó desde que una amiga me enseñó a ver el lado interesante de los museos, a que más que darle sentido a una pintura abstracta, tenía que identificar el cómo yo me sentía al ver esa obra de arte. He de decir que mis primeras clases no eran para nada enfocadas al arte, porque no sabía cómo trabajarlas, así que no le di importancia hasta que. En lo que va de este último año, entre los cursos que he tomado, entendí que desarrollar el lado artístico de los niños, resulta sin lugar a dudas la manera más bonita en el cómo ellas y ellos se apropian de su conocimiento. Sumado a que en el plan semanal, con mis compañeras de grado soy la encargada de desarrollar actividades de Educación Artística.
Y he descubierto, que el arte no es sólo pintar, sino bailar, expresar emociones, fomenta la creatividad, y evidentemente no es una forma bancaría de educar. Ahora, enfoco mis sesiones virtuales en rescatar su parte creativa, pero considero que me falta más formación en ese ámbito. Sin contar que cada que veo sus diferentes formas de expresarse a través del arte, lo disfruto muchísimo.
-