A partir desde el siglo once se produjeron en Europa las segundas invasiones bárbaras de vikingos, húngaros y piratas musulmanes. Como los reyes no podían garantizar la seguridad de la población, se creó el feudalismo, que consiste en que los vasallos le deben ser leales al rey y dar su vida por la población y luchar en guerras. Está compuesta por las tierras del señor, bosques, la aldea, el castillo y las tierras de labor.