Irak es, por tanto, una tierra marcada en el último medio siglo por varios acontecimientos trágicos y muchas heridas que siguen abiertas. "La primera guerra duró ocho años, sustancialmente fue un conflicto que opuso al Irak sunita al Irán chiita y que Saddam Hussein quería tanto para evitar el riesgo de que los chiitas iraquíes siguieran el modelo iraní, como para hacerse con el petróleo iraní". Así lo afirmó en una entrevista con Vatican News el profesor Gianni La Bella, profesor de Historia Contemporánea de la Universidad de Módena y Reggio Emilia. "Imaginada como una 'guerra relámpago', dejó un millón de muertos en el campo de batalla y terminó sólo por e