Alimentos (p. ej., leche, huevos, soja, trigo, cacahuetes, pescado), Alérgenos inhalantes (p. ej., ácaros del polvo, hongos, epitelios animales), Colonización por Staphylococcus aureus en la piel debido a deficiencias en los péptidos antimicrobianos endógenos, Productos tópicos (p. ej., cosméticos, fragancias, jabones duros), Sudoración y Telas ásperas