Es necesario tener sensibilidad y conocimiento sobre las personas a las que vamos a enseñar, desde lo más basico y objetivo - cuántos son, cuántas mujeres y varones, de qué edades, qué lengua hablan, cuántos repiten, en qué se ocupan fuera e la escuela - hasta lo más cualitativo.
Qué habilidades han consolidado, qué dificultades presentan, cuál es su temperamento, su estado habitual de ánimo y contextual que hacen sus familias, qué actividades caracterizan a la comunidad, qué suelen celebrar, etc.