Sangrado de las encías, Dolor de huesos, Fiebre, Infecciones frecuentes, Sangrado nasal frecuente o intenso, Bultos causados por la inflamación de los ganglios linfáticos del cuello, las axilas, el abdomen o la ingle, o alrededor de ellos,Piel pálida,Falta de aire, Debilidad, fatiga o disminución general de la energía, fatiga, fiebre, pérdida de apetito o sudores nocturnos, dificultad para respirar, facilidad para desarrollar hematomas, ganglios linfáticos inflamados, hemorragia nasal, infección, manchas rojas en la piel, palidez, pérdida de peso o sangrado de las encías