Siglo XIX, la sospecha abrió una grieta en esesujeto que se definía como libre, autónomo, racional, homogéneo, capaz de representarse el mundo y colocarlo bajo su dominio. Surgen una serie de pensadores que van a producir una suerte de descentramiento del sujeto, al quitar al hombre y a su conciencia del centro de la escena, al quebrar su unidad, al sostener que el hombre está determinado por circunstancias que la propia conciencia desconoce o que su conciencia es falsa y debe entonces desconfiar de sus pensamientos. Emerge así un sujeto condicionado por las relaciones sociales, el fluir del inconsciente, las pasiones, los sentimientos, el cuerpo. la identificación clásica
ser=representación=pensamiento” (Pardo, 1996:140-141)