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ACTOS DEL HABLA LA ESCUCHA - Coggle Diagram
ACTOS DEL HABLA
LA ESCUCHA
El privilegio de no contradecirse les pertenece a los testarudos, a los duros de aprendizaje y
a los muertos. Quienes se contradicen, muestran que son capaces de escuchar.
La escucha es una de las competencias más importantes en un ser humano.
Quien no se siente escuchado,
normalmente tampoco sabe escuchar a los demás.
El cambio del otro será el resultado de nuestro propio cambio.
Lograremos que nos
escuche una vez que hayamos aprendido primero a escuchar mejor.
En función de
la escucha, construimos nuestras relaciones personales, interpretamos la vida, nos proyectamos hacia el futuro y definimos nuestra capacidad de aprendizaje y de
transformación del mundo.
La escucha como precondición del habla efectiva
Si lo que he dicho nadie lo entiende, si digo una cosa y se me escucha otra, mi habla no ha sido efectiva.
Quien habla sólo en función de lo que le interesa a sí mismo, difícilmente logrará ser escuchado.
Para poder determinar lo que al otro le interesa, suele ser fundamental haberlo escuchado antes de decir lo que quiero decir.
La escucha no sólo aparece como resultado del habla, sino que es importante también que esté presente antes del habla para así poder conducirla hacia una escucha
efectiva posterior.
La escucha como problema: La brecha inevitable
Lo dicho nos permite concluir que el sentido que el oyente le confiere a lo dicho por el orador nunca es igual al sentido que el propio orador le confiere a lo que dice.
Siempre habrá una distancia, una brecha, entre el orador y el oyente.
Al reconocer la brecha, descubrimos que disponemos de dos herramientas fundamentales para hacernos cargo del problema que nos plantea.
La primera de ellas es aprender a respetar las diferencias que inevitablemente surgirán en
toda relación.
Segunda herramienta: En la medida que reconocemos la existencia de esta brecha, podemos también hacernos cargo de ella, hacer una suerte de monitoreo y gestión de la brecha y procurar que ella no alcance proporciones críticas.
Escuchar es interpretar
Para escuchar, decimos, no basta con oír, es necesario interpretar lo que el otro dice.
Escuchamos con todos nuestros sentidos y no sólo con el oído.
Escuchamos desde nuestras expectativas, desde lo que consideramos "debe" pasar, hasta lo
que creemos que eventualmente "podría" pasar.
Si la escucha involucra una acción interpretativa, de ello se deduce que cada vez que me hallo escuchando estoy muy activamente procurando hacer sentido de lo que se está diciendo.
Algunas herramientas básicas para reducir la brecha
a.- Verificar escuchas
La verificación puedo hacerla tanto cuando estoy en la posición del orador, como cuando
estoy en el lugar del oyente.
Si he sido el orador, puedo pedirle a mi oyente que, en sus palabras me diga lo que entiende
de lo que yo le he dicho.
b.- Compartir inquietudes
Problemas frecuentes en nuestra escucha suelen resultar de no saber cuál es la inquietud que conduce al orador a decir lo que dice.
Para afinar la escucha y reducir posibles brechas, debemos preguntar por la inquietud.
Todo esto nos conduce a sugerir que, según el carácter de lo que vayamos a decir, evaluemos la conveniencia de compartir con el oyente las inquietudes que nos conducen a decirle tal o cual cosa.
c.- Indagar
Para ello lo que hacemos es preguntar, es pedirle al orador que se nos proporcione más información de manera de afinar, de completar, de corregir, lo que hasta el momento
hemos escuchado.
El objetivo es siempre asegurar que la interpretación que surge de nuestra escucha disponga de todos los elementos para que esa brecha sea lo más pequeña posible.