Análisis: Aunque tanto el conocimiento científico como el conocimiento vulgar son producto de nuestras vivencias, no son lo mismo, ya que cuando hablamos del conocimiento científico nos referimos a alguna vivencia u observación de la cual tenemos un dato, motivo o explicación del por qué sucede eso. Mientras que en el conocimiento vulgar o también llamado conocimiento empírico, aunque se refiere igual a nuestras vivencias, en este caso no sabemos si son ciertas o no, y por que ocurren, es decir, no hay ninguna explicación, ni ha sido comprobado, verificado o experimentado. El conocimiento vulgar es aquel que desde bebes vamos adquiriendo con el tiempo y con la experiencia, un claro ejemplo de esto, es cuando de niños, por falta de experiencia y vivencias, teníamos la curiosidad o nos llamaba la atención el fuego, y queríamos tocarlo y tocarlo, y aunque nos advertían del dolor o peligro que podríamos correr, ignorábamos esos comentarios y hasta que no lo experimentábamos no lo entendíamos, y cuando lo tocábamos nos quemaba y hasta llorábamos, pero nos quedaba de lección de lo pasaría si lo volviésemos hacer y con ese conocimiento adquirido, en otra ocasión ya no haríamos lo mismo, porque sabemos la consecuencia que ese acto trae, de eso se trata el conocimiento empírico. Por otro lado un ejemplo del conocimiento científico, es el teorema de Pitágoras, que no sólo fue pensado, sino que para ser verificado, se hicieron experimentos, investigaciones u observaciones, y se tuvo que comprobar que lo que Pitágoras decía era cierto, para así exponer esa idea al mundo y de esa manera poder ser utilizado. Otro ejemplo, es que hace años cuando se hablaba sobre la forma de la tierra o como estaba conformado el universo, muchos decían y pensaban que la tierra era redonda, pero esta teoría nunca pudo ser comprobada (por obvias razones), hasta que alguien vio más allá y dijo que el planeta Tierra tenía la forma de una esfera, aunque achatada en los polos, pero esta teoría para ser aceptada y verificada, tuvo que ser estudiada y puesta en práctica, mediante investigaciones, experimentos, y estudios. Es así que se puede diferenciar el conocimiento científico del conocimiento vulgar.