La obra de san Juan de la Cruz es, pese a su brevedad, una de las cumbres de la lírica castellana. En su honda poesía supo asimilar diversas fuentes literarias, entre las que destacan la lírica amorosa renacentista, la poesía tradicional y la literatura bíblica, especialmente, el Cantar de los Cantares.
Amor Místico
Este tema suele aparecer relacionado con tópicos como el aurea mediocritas y el beatus ille , que expresan la virtud de llevar una vida sencilla, sin grandes pretensiones ni abundancia de bienes materiales, Otros asuntos son el elogio de la música, cuya armonía reproduce la del universo y la crítica de vicios como la lujuria o la avaricia.
Estilo
En sus tres poemas místicos, Cántico espiritual, Llama de amor viva y Noche oscura, san Juan de la Cruz utiliza la lira, una estrofa que combina versos endecasílabos y heptasílabos de rima consonante. Emplea un vocabulario comprensible, y en sus imágenes se aprecia la huella de la poesía amorosa, tanto tradicional como culta.