se generan por la reacción, a veces violenta, de diversas sustancias químicas, mientras se producen, almacenan o transportan. Las reacciones se manifiestan como incendios, explosiones, fugas, radiaciones y derrames. Por eso, comúnmente suceden en fábricas, centrales eléctricas, talleres, ductos de sustancias combustibles y pozos petroleros.