Se recomienda utilizar la herramienta de tamizaje nutricional MUST para identificar a todos aquellos pacientes malnutridos en pacientes que ingresan a urgencias.
Antes de iniciar la alimentación lo ideal sería
evaluar las concentraciones séricas de fósforo, debido a que cuando se presenta la hipofosfatemia genera una importante resistencia a la insulina y de esa manera evitar hiperglucemias.
El uso de tiamina, se recomienda de 200 a 300 mg/día en los primeros 5 días. Suplementación durante de multivitamínico durante 10 días y reponer la deficiencia de elementos que sean necesarios.
Restringir el sodio a <1 mmol/kg/día durante los primeros
7 días.
En pacientes de bajo riesgo se recomienda iniciar con 15-25 kcal/kg/día en los primeros 3 días por cualquier vía de alimentación. Con una distribución de HCO de 40-60%, Lípidos 30-40% y Proteínas 15-20%. Para el día 4, suministrar 30 kcal/kg/día con la misma distribución anterior. Entre el día 5 al 10, aportar todos los requerimientos, sin cambiar la distribución de los nutrientes.
En pacientes de alto riesgo la recomendación durante
los primeros 3 días es comenzar la alimentación
de 10-15 kcal/kg/día, por cualquier vía de
alimentación. Misma distribución de macronutrientes
de pacientes de bajo riesgo. Para los días 4 y 5, aportar de
15-25 kcal/kg/día. El día 6, progresar con 30 kcal/
kg/día. Entre los días 7 y 10 aportar todos los requerimientos.
En pacientes de muy alto riesgo, se recomienda
iniciar la alimentación de 5-10 kcal/kg/día, durante los primeros 3 días por cualquier vía, con la misma distribución que los dos grupos anteriores. Para los días 4 al 6, aportar 10-20 kcal/kg/día. Del día 7 al 9, progresar de con 20-30 kcal/kg/día Para el día 10, aportar todo el requerimiento.
Monitorizar los electrolitos séricos diariamente
los primeros 3 días, posteriormente cada 2 o 3
días.
Realizar diariamente una examinación clínica,
en busca de signos de edema una o dos
veces por día.
Monitorizar el ritmo cardiaco con electrocardiograma diariamente.