El Estado garantizará el derecho a acceder a fuentes de información; a buscar, recibir, conocer y difundir información objetiva, veraz, plural, oportuna y sin censura previa, de los acontecimientos de interés general, que preserve los valores de la comunidad, especialmente por parte de periodistas y comunicadores sociales (…)
Las leyes relacionadas con la información tienen una visión limitada, pero suelen tener libertad entre los actores que intervienen en el mercadeo de la información y de sus tecnologías.