´´Pero ahora dejad también vosotros todas estas cosa: ira, enojo, malicia, blasfemia, palabras deshonestas de vuestra boca. No mintáis los unos a los otros, habiéndoos despojado del viejo hombre con sus hechos, revestido del nuevo, el cual conforme a la imagen del que lo creo se va renovando hasta el conocimiento previo´´ (colosenses 3:8-10)