Descendiente del proceso de calcografía, es un sistema de impresión dedicado al mercado editorial y de embalajes flexibles y cartonados que utiliza un cilindro de huecograbado (bajo relieve) y tinta líquida de secado rápido. El cilindro, responsable por transferir el grafismo para el substrato, está dentro del tintero y recoge la tinta que penetra en los alvéolos, pequeños agujeros en formato de rombo. Después, la racleta, una lámina de acero, retira el exceso de tinta permitiendo la impresión. Las máquinas de rotograbado tienen alta velocidad y por eso se utilizan para materiales que necesitan agilidad de producción y altas tiradas.