Después del colapso del sector, una serie de corrientes piroclásticas de densidad (PDC), compuestas de cenizas basálticas de finas a gruesas y de angulares a líticas sub-redondeadas, cubrieron una superficie de aproximadamente 300 km2, con espesores que variaron entre 13 y 40 my un total estimado, volumen N5 km3, produciendo el depósito denominado “Arenas Negras de Trupán-Laja”