Donald Hebb (1904-1985), centró sus investigaciones en el estudio del lóbulo frontal, comprobando que el cociente intelectual de las
personas que habían sufrido daño frontal no disminuía de manera sensible, gracias a el se empezó a tener en cuenta la importancia de la Psicología para valorar las lesiones cerebrales, estudió la memoria y estableció diferencias neurofisiológicas entre memoria a corto plazo como un proceso activo de duración limitada y memoria a largo plazo, afirmó que es posible la formación de nuevas sinapsis como resultado de la experiencia,