La palabra “ciencia” proviene del latín scientia, que traduce “conocimiento”, pero su empleo para denominar al estudio crítico de la naturaleza es reciente: en el siglo XIX el británico William Whewell (1794-1866) comenzó a emplear el término “científico” para referirse a quienes practicaban lo que toda la vida se llamó “filosofía”, “naturalismo”, “historia natural” o “filosofía natural”, esto es, el estudio de las leyes de la naturaleza.