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DESARROLLO DE LA PERSONALIDAD,INFANCIA Y PRIMERA NIÑEZ. - Coggle Diagram
DESARROLLO DE LA PERSONALIDAD,INFANCIA Y PRIMERA NIÑEZ.
DESARROLLO DEL EGO Y D ISOLUC IÓN
DÉ L A U N ID A D SIMBIÓTICA
Las funciones del ego autónomas y la esfera libre de conflictos:
maduración y el desarrollo ocurridos en las funciones perceptuales, cognoscitivas y motoras que permiten organizar la realidad externa.
Id y ego, procesos primarios y secundarios:
. El sistema del id (el sistema del inconsciente, de Freud) continuará operando como proceso primario,
es decir, como catéxias o energías móviles El sistema del ego se va
diferenciando progresivamente de aquel núcleo id-ego según el infante ya experimentando cada vez más demora, frustración y conflicto.
MÁRQUEZ CASTILL GUILLERMINA ITZEL
LPS 6 VESPERTINO 18/02/21
Formación de defensas y límites: las defensas también ayudan a establecer los limites del funcionamiento entre el ego y la realidad externa entre ambos y la realidad somática.
Introyecciones del ego: Mientras van madurando y se van desarrollando con el uso de las funciones
perceptuales, cognoscitivas y motoras, mientras se va diferenciando el ego del id de la realidad externa y somática ; llamámos introyecciones del ego a los
resultados del tal incorporación.
Objetos internos: Al cristalizar los límites del ego, esas tempranas introyecciones del ego vienen
a constituir los objetos internos, mismos que representan a los externos, en especial a los padres.
E l infante como individuo autónomo: Cuando el infante es capaz de sentarse y de ponerse de pie, sus relaciones
activas con la realidad externa y la organización paralela de un sistema dé ego,
han progresado
Cuando no se logra resolver
la relación simbiótica.
a) Niños autistas: Los niños autistas quedan permanentemente incapacitados para formar relaciones efectivas con los objetos y de erigir una realidad externa.
b) Niños simbióticos: Continúan desarrollando una relación dependiente sumamente
distorsionada con la figura materna llamada síndrome psicosis infantil simbiótica.
FASE DE AU TO AF IRM A C IÓ N
Y DE CO N TRO L DE ESFÍNTERES
Se inicia cuando comienza a disolverse la unidad simbiótica madre-niño y
termina cuando éste entra en las luchas y los conflictos edípicos.
niño se esfuerza por independizarse como individuo diferenciando que tiene una
identidad propia, pero sin apartarse del grupo familiar
También caracteriza a esta fase del desarrollo, una capacidad creciente para
comprender y emplear el habla.
Las formaciones de reacción contra
el ensuciarse, características de este periodo, se convierten en importantes mecanismos de autocontrol, que por varios años preceden a la información del superego.
Transiciones de la simbiosis a la autoafirmación
y al control de esfínteres
Este reacciona ante los
“extraños” —incluyendo padre y hermanos.
Según va pudiendo diferenciar el infante el Yo o el mí de la madre (identificación primaria)
L A IDENTIFICACIÓN SEXUAL Y EL AMOR H ACIA EL OBJETO EN EL PERIODO PREEDÍPICO
La madre es siempre el primer objeto amoroso del infante.
Además, la madre le proporciona al infante las primeras oportunidades de identificación,
Cuando la organización del ego de un infante comienza a madurar y a asentar
límites, el niño interioriza aspectos de ambos padres en relación con sus necesidades y satisfacciones inmediatas.
Fase edípica: la pubertad como el primer florecimiento de la sexualidad humana, cuando viene
a ser el segundo.
el amor de los niños edípicos y el de sus padres maduros emocionalmente el niño normal el amor edípico tiene una intención y un propósito francamente sexuales, mientras que el amor paterno se sublima en un afecto cordial y tolerante.
c) Niña edípica:
La niña también forma una unión simbiótica con la madre; y ésta la inicia, gracias a sus cuidados,
a) El niño edípico
El niño edípico desarrolla un orgullo intenso por su órgano genitales corporales Tal ansiedad surge en relación con él
miedo que el niño siente sufrir lesiones corporales, dé perder aquello que más
valdrá y ansiedad dé castración).
b ) Ansiedad de castración: e la ansiedad de castración, el miedo a perder o ver
dañado el órgano genital, celos y el
resentimiento furiosos que el niño siente contra el padre.
El
niño modifica y enriquece lo que introyecta (sus introyecciones de ego) de acuerdo
con su propia personalidad infantil, que está en desarrollo.
Los padres y los hermanos, en una situación normal, fomentan en el niño
estos esfuerzos por diferenciarse y constituirse en una persona aparte
El especial lugar que tiene el control de esfínteres.
El control de los intestinos
puede llegar a ser un logró nuevo y placentero, un paso más hacia e l dominio y la
madurez.
El carácter compulsivo: La persona llega a adulto siendo s irrazonable, obstinado, parsimonioso y controlado; suele frustrar y controlar a los
demás con reglas y leyes arbitrarias que invoca
La personalidad vulnerable a una regresión compulsiva obsesiva: la fijación a nivel descontrol de esfínteres es que, sujeta a
estrés, la persona caiga en neurosis compulsivas obsesivas francas.
La persona obediente en exceso: en ese nivel de desarrollo, la derrota y se vuelve excesivamente obediente, puede pasar por la adolescencia y llegar a la edad adulta siendo una persona intimidada y compulsivamente “buena” .
Fijación anal y placer sadomasoquista: El placer sadomasoquista y el enojo parecen estar relacionados con la autoafirmación infantil y con la furia que llena a un niño frustrado, porque puede hacer mucho, pero se encuentra sujeto a demasiado control por parte de los demás.