Esta ley, surgió por medio de procesos experimentales, en los que se midieron los tiempos de respuesta de un sujeto. Con estos, se comprobó que al someter a un individuo a un gran número de estímulos u opciones, más tiempo demora en interpretar sus posibilidades y, por lo tanto, demora más en tomar una decisión.
En el comercio online vemos ejemplos de productos recomendados o la reducción de opciones por medio de filtros de búsqueda de productos. Estos también cumplen con la intención de simplificar las opciones de búsqueda.
Cuando se diseña la interacción con tareas altamente complejas, se busca reducir esta dificultad por medio de su subdivisión en pequeños pasos. Como por ejemplo, cuando tenemos que inscribirnos para comprar online y agregar información personal, bancaria y de despacho.
Diseño de acciones donde se pre-define una acción y se destaca por sobre otras opciones. Con esto ayudamos a los usuarios a identificar cual es la opción que deben seguir. Y también, hacemos más fluida su interacción