Este tipo de discriminación se basa en la valoración de un modelo de belleza impuesto por diferentes instituciones, generalmente a través de los medios masivos de comunicación, se da hacia quienes en su apariencia física no se apegan al modelo esperado o aceptado, que por lo general es de piel blanca, rasgos afilados, cuerpo delgado, alto y de proporciones perfectas, lo que incluye una forma determinada de vestir “a la moda”.