Síntomas: dificultad para establecer y mantener relaciones íntimas, congelamiento emocional, perfeccionismo, necesidad obsesiva de controlar la conducta de otros, conductas compulsivas, sentirse sobre responsable por las conductas de otros, profundos sentimientos de incapacidad, vergüenza tóxica, autoimagen negativa, dependencia de aprobación externa, dolores de espalda y cabeza crónicos, gastritis y diarrea crónica, depresión.