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Adaptación al grupo de iguales - Coggle Diagram
Adaptación al grupo de iguales
Las interacciones con otros siguen unas pautas del desarrollo, con comportamientos característicos de cada etapa a través del juego.
El juego
aparece como un
medio de adaptación
del niño o niña a la sociedad en que vive, y como implica una situación de contacto con otros, el niño o niña se enfrenta a conflictos, colabora, aprende y comparte, de manera que se enriquece.
Hasta los 5 años los niños y niñas se implican en actividades de juego por placer, sin una conciencia de las normas.
A apartir de los 5 años comienzan a tener contacto con las normas del juego. Se inicia la parte lógica del juego y se hace más grupal y simbólico.
Hasta los 8 años perdura la percepción de inviolabilidad de la norma.
A partir de los 8 años, los niños aceptan las reglas pero son capaces de modificarlas si así lo desean.
Para
Vigotsky
el juego es un momento transicional de la niñez a la adultez.
Piaget
señala que hay 3 tipos de juego en la infancia: de ejercicio (0 a 2 años), simbólicos (2 a 7 años) y de reglas (7 a 11 años).
La dinámica familiar y la del grupo influyen en las conductas agresivas. La conducta agresiva tiende a ser un atributo estable en tanto que es una
forma de respuesta personal a distintas situaciones
.
Las manifestaciones agresivas a partir de los 6 años tienden a ser más verbales y menos físicas.
Si a los 8 años se siguen manteniendo rabietas y conductas de desafío, es conveniente atención específica.
Los programas violentos producen efectos en la conducta de los niños
inmediatamente después
de visualizar secuencias agresivas.
La agresividad de los personajes humanos tienen mayor efecto que la de los dibujos animados.
Los efectos más agresivos de los niños y niñas más agresivos, son los que más consumen la programación.
La
conducta agresiva
es aquella caracterizada por gritos, daños a personas o cosas materiales, cólera o rabietas, discuciones constantes con cariz violento, desobediencia sistemática. Niños que tienen poca tolerancia a la frustración.
Puede presentarse de manera
física, verbal o psicológica
.
El bullying
se tiende a dar en los últimos cursos de primaria y en la secundaria
Las
conductas prosociales
aumentan a medida que los niños se hacen mayores. Y las razones que estimulan estas conductas son sociales, afectivas y cognitivas.
La
educación moral
se preocupa por estas cuestiones, intentando fomentar en los niños y niñas la predisposición a la conducta empática y prosocial frente a la conducta agresiva.
La
empatía
es un estado interno de identificación o entendimiento de la situación que padece otro que no soy yo. Se empieza a dar a partir de los 6-7 años
El niño o niña aprende, entre otras formas, por imitación y a estas edades ve como referente al adulto más cercano, por lo que
padres, madres y hermanos o hermanas serán decisivos en su aprehensión de situaciones y reacción de empatía
.