Los daños indirectos vienen motivados por inducir, a su vez, otros riesgos. Este fue el caso del terremoto de Wenchuan, China donde se produjeron cientos de movimientos de ladera en un área de relieve escarpado, algunos incluso de grandes dimensiones, estas zonas inestables colapsaron los fondos de valle, generando represamiento en las zonas más altas, provocando inundaciones en las zonas bajas a los deslizamientos.