Aparte de los elementos citados, “existen dos pares de cualidades fundamentales: caliente y frío, seco y húmedo”. La unión de estas dos cualidades correspondía a los cuatro elementos, así: el fuego es cálido y seco, el aire, cálido y húmedo, la tierra, fría y seca, y el agua, fría y húmeda. En ese tiempo se creía que la temperatura de un cuerpo dependía de estas dos cualidades.