Unidad 1: Introducción al manejo del conflicto desde el modelo del ser humano.
Concepto de conflicto
Elementos de conflicto
Tipos de conflicto
Etapas del conflicto
Elementos relacionados a la persona
Protagonistas. Se trataría de identificar a los protagonistas directos del conflicto, así como a los indirectos.
El poder. En este caso habría que detectar si existe algún tipo de desigualdad jerárquica entre los implicados.
Percepción del conflicto. Por otro lado, conviene tener en cuenta la percepción del problema; es decir, el modo de entender el conflicto y su justificación.
Emociones y sentimientos. Constituyen un elemento esencial en la vivencia del conflicto.
Las posiciones. Es la postura inicial de las partes ante el conflicto.
Necesidades e intereses. Los intereses son los beneficios que deseamos obtener mediante la resolución del conflicto. Tras un interés siempre subyace una necesidad. Las necesidades e intereses inciden en la postura adoptada.
Principios y valores. Son el conjunto de elementos culturales, ideas y creencias que justifican y orientan los comportamientos.
Elementos relacionados al desarrollo del conflicto
Dinámica del conflicto. Es el camino que ha seguido el conflicto, desde su origen hasta que surge el problema. En muchas ocasiones los conflictos se mantienen latentes durante largo tiempo, hasta que aparece un hecho concreto que lo hace aflorar.
La relación y la comunicación. Si existe un buen clima entre los miembros de un grupo, cuando surge un conflicto se resuelve a través del diálogo. Si, por el contrario, las relaciones interpersonales no son positivas, los conflictos se agrandan.
La aceptación del conflicto. Una vez detectado el conflicto, es preciso aceptarlo como tal. Se manifiesta a raíz de los hechos plasmados en expresiones verbales o físicas. Conviene recordar que la etiología del conflicto puede no guardar relación con la manifestación del mismo.
Conflictos competitivos
Los sentimientos negativos, la intensidad de las emociones y el tener en cuenta sólo los propios intereses suelen provocar conflictos.
Los conflictos ligados a la autoestima tienen más posibilidad de ser competitivos.
Si no se definen y concretan los conflictos y sus causas, no es imposible buscarles vías de solución.
Conflictos cooperativos
Cuanto menos intervengan las emociones y sentimientos y mayor sea la distancia personal, más fácil será resolver el conflicto de un modo cooperativo.
Los conflictos no ligados a la autoestima se resuelven con más facilidad de manera cooperativa.
Hay que dirigir el foco del conflicto a la consecución de las necesidades y objetivos deseados.
Definir los conflictos de manera concreta, ajustada y precisa favorece la cooperación.
De relación
Información
Interés
Valores
Intrapersonal
Interpesonal
Intergrupal
Agresivo
Pasivo
Son aquellos relacionados a emociones negativas, en donde entran el juego los prejuicios y estereotipos.
Como su nombre lo dice, la o las personas carecen de información para poder tomar alguna decisión, dando cabida a las dudas.
Sacrificio de las necesidades del otro para satisfacer las propias. Carencia de empatía.
Cuando los sistemas de creencias son incompatibles.
Es aquel que surge del interior de la persona, involucra las emociones, formas de pensar, ideas, impulsos y valores.
El que ocurre entre personas: amigos, pareja, miembros de la familia, etc.
Suceden en los miembros de un grupo pequeño, como por ejemplo, entre los integrantes de un equipo y /o los compañeros del trabajo.
Cuando viene acompañado de alguna forma de violencia, ya sea física o emocional.
Cuando alguno de los involucrados no está generando violencia, sin embargo, al no contribuir en la solución del conflicto, propicia que el problema crezca.
Todos los conflictos sociales implican una percepción de intereses divergentes, lo sean o
no en la realidad.
En palabras de Alzate, independientemente de si las diferencias ocurren
entre individuos o entre estados, entre grupos o entre organizaciones, todo conflicto significa cierto grado de incompatibilidad percibida entre las partes, con respecto a los objetivos o con respecto a los medios utilizados para alcanzarlos.
1.- Actitudes y creencias
El ciclo empieza por nosotros/as y por nuestras actitudes y creencias sobre el conflicto.
Estas actitudes y creencias tienen su origen en diversas fuentes, como por ejemplo, en los mensajes recibidos en la infancia sobre los conflictos, los modelos de
conducta de progenitores, tutores/as, profesorado y amistades, otros modelos recibidos a través de
los medios de comunicación o las experiencias propias vividas en relación con los conflictos.
2.- El conflicto
En este punto el conflicto ocurre dado que es un proceso inherente a las relaciones sociales y es inevitable en todo marco de relación. Es un fenómeno, por
lo tanto ubicuo y universal.
3.- La respuesta
Es el momento en el que actuamos. Podemos gritar, intentar hablar sobre la situación, o podemos, simplemente, abandonar.
4.- El resultado
La respuesta tenderá siempre a llevarnos al mismo resultado.
La consecuencia
servirá para reforzar la creencia y de este modo el ciclo se mantiene.