ALGUNOS PAÍSES EUROPEOS TIENE UNA OPINIÓN ACERCA DE LA FLUORACIÓN DEL AGUA, POR RAZONES QUE VAN DE LA CONTAMINACIÓN O RAZONES DE LIBERTAS, FALTA DE CONFIANZA EN LOS GOBIERNOS O APOYO A LAS INICIATIVAS PRIVADAS. SE OPONEN RADICALMENTE EN AUSTRALIA, BÉLGICA, DINAMARCA, FINLANDIA, FRANCIA, ALEMANIA, ITALIA, LUXEMBURGO, HOLANDA, PORTUGAL, ESPAÑA Y EL REINO UNIDO; LA APOYAN EN GRECIA, IRLANDA, POLONIA Y SUECIA.