La temperatura de fusión del hielo (que corresponde a 273,16 K) y la temperatura de ebullición del agua (que corresponde a 373,16 K) se toman como referencias en la escala Kelvin.
El intervalo entre estas dos temperaturas (373,16 K y 273,16 K) se divide en 100 partes iguales, cada una de las cuales se llama Kelvin (y no grados Kelvin). Por lo tanto, las diferencias de temperatura son las mismas en unidades de kelvin y grados Celsius, o ΔTC=ΔTK.