Todo lo anterior le lleva a afirmar que "la realidad, tal como es habitualmente experimentada, es reemplazada por ele mentos delirantes y alucinatorios. El paciente demanda más que un yo auxi liar, necesita un "mundo auxiliar" 5. Ese mundo es recreado, pues ya se encon traba en el paciente, por medio del psi codrama. Así, un poco más adelante, nos enseña que en un paciente, del que se decía que tenía una personalidad cerrada, se evidenció un conjunto de sensaciones y de hechos importantes para él, cuando en vez de juzgarle con nuestra realidad, se introdujo la de su persona, con su "psicodrama".