Al estar en una solución acuosa, tienen un valor de pH inferior a 7, son electrolitos, es decir, pueden descomponerse cuando son atravesados por una corriente eléctrica, al estar en contacto con un metal reactivo reaccionan desprendiendo gas idrogeno. Ademas, reaccionan desprendiendo dióxido de carbono gaseoso al estar en contacto con un carbonato metálico. Finalmente al interactuar con bases reaccionan para formar únicamente sal y agua.