El condicionamiento clásico y operante.
Condicionamiento Operante:
Condicionamiento Clásico:
En los primeros años del siglo XX, Iván Pávlov, un estudioso ruso, estaba investigando sobre la salivación de los animales, queriendo descubrir su función y composición. Durante los experimentos que estaba realizando, notó que los perros, sus sujetos experimentales, comenzaban a salivar cuando lo oían llegar, incluso antes de ver la comida. Este fenómeno lo intrigó: ¿cómo podía saber que, después de los pasos de Pavlov, llegaría una comida, ¿qué justificaría la salivación? Impulsado por esta incógnita, comenzó a investigar en este sentido y descubrió el condicionamiento clásico.
Gracias al condicionamiento clásico, el sujeto puede llegar a proponer una respuesta reflexiva como consecuencia de un estímulo, inicialmente neutro y luego condicionado, de nuestra elección.
Principios del condicionamiento clásico
Pavlov, pues, observando el comportamiento de los perros en sus estudios de fisiología, llegó a teorizar los principios del condicionamiento clásico:
Un estímulo incondicional provoca una respuesta incondicional.
Si al estímulo incondicional se le añade un estímulo condicionado, después de algunas estimulaciones, se tendrá una respuesta a la mera presentación del estímulo condicionado. Esta respuesta es la respuesta condicionada.
Este mecanismo explica la adquisición de comportamientos primarios como el miedo al dolor, el hambre, etc. Su uso permite la inducción de reacciones de alarma (aceleración cardíaca, activación del sistema nervioso, etc.).
Ejemplos de condicionamiento clásico
La vista o el olor de una comida en particular te hace sentir náuseas.
La vista o el olor de una comida que te recuerda a tu infancia te hace sentir hambriento y excitado.
Sueñas como suena el teléfono o un despertador te pone alerta o ansioso.
Un olor familiar te hace feliz porque te recuerda a alguien que te gusta.
Estar en tu habitación con luces suaves te hace sentir somnoliento.
Principios del condicionamiento operante
En el famoso experimento de la Skinner box, ideado por el homónimo estudioso, el ratón dentro de la jaula era libre de moverse al azar. En un momento dado, la rata activó una palanca diseñada para dejar caer comida a toda presión. En poco tiempo el animal comenzó a repetir el comportamiento una y otra vez: había aprendido que era el medio para obtener una ventaja llamada refuerzo. El aprendizaje de este tipo se debe a un condicionamiento que Skinner llama operativo, es decir, influido por las consecuencias.
Ejemplos de condicionamiento operante
Después de golpear a un compañero de clase, el niño o la niña se sienta por separado y no se le permite hablar con nadie. De este modo, no volverá a golpear a otra pareja. Es un castigo positivo.
Una persona que decide tomar un camino diferente durante el paseo matutino para evitar un vertedero y luego aumenta la velocidad de carrera y la distancia recorrida. Es un refuerzo negativo.
Una persona deja de molestar a su novia sobre un tema después de que le pida que se calle. Es un castigo negativo.
DIFERENCIAS
El condicionamiento clásico, el aprendizaje se produce mediante la asociación de un estímulo inicial que provoca en el organismo una respuesta incondicionada regular. En el condicionamiento operante, el aprendizaje se debe a la asociación de recompensas y castigos con una determinada conducta.
NOMBRE. GILMA SUMPINANCH