El rasgo que define a la GEA es, sobre todo, el cambio en la consistencia de las deposiciones y, secundariamente, un aumento en el número de las mismas. Acompañando a la diarrea, pueden aparecer: fiebre, vómitos, dolor abdominal, inapetencia, síntomas respiratorios e, infrecuentemente, signos de afectación del sistema nervioso central