La globalización no es un fenómeno lineal, sino que va cambiando de dirección según el orden mundial que esté presente, como la visión política, los nuevos modelos de comercio, su sistema monetario, entre otros. El futuro de la globalización está dirigido a la expansión del mercado mundial, apoyándose en el constante avance de la tecnología, de esta manera los países y empresas lograrán mayor eficacia al momento de comprar o vender bienes. Pero si no se tiene cuidado, esto traerá consecuencias, pues desencadenará una serie de conflictos sociales y económicos que darían paso a una inflación en el precio de recursos o bienes, además de generar la aparición de nuevos partidos políticos y con esto llegar a una inestabilidad socioeconómica para el país. Es por esto que los países que se encuentran en desarrollo deben tener planes con aquellos países de primer mundo para que la crisis no sea un golpe tan fuerte.